Salud aumentó su negocio un 3,44% durante el pasado año y para este se esperan crecimientos entre el 4% y el 5%. Esta es la apuesta del consejero delegado de Sanitas, Iñaki Ereño, aunque también ve riesgos. Analizó que el crecimiento es por prima, “no por el número de asegurados. Trabajamos sobre bases de los mismos clientes y esto mete mucha presión en el precio”. Además, indicó que el margen técnico se ha deteriorado en un 4%.
Otra de las presiones de este negocio ha llegado por la gestión de los hospitales privados. Explicó que hace unos años una de las bazas electorales era la supresión de las listas de espera, lo que se traducía en un negocio para estos hospitales por la derivación de pacientes. Con la crisis económica esto ha pasado a segundo plano y han dejado de ingresar dinero por este lado, con lo cual la presión se traslada a las aseguradoras, su principal cliente.
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